Cómo llevar un gato al veterinario, correctamente y sin estrés

Como cuidadores de gatos, una de nuestras mayores preocupaciones, es la dificultad para conseguir que accedan a entrar al transportín y así poder llevarlos a la consulta veterinaria.

Pero ésta es sólo la punta del iceberg. Nuestros gatos, animales territoriales y de rutina que dan alto valor a la predictibilidad del entorno que les rodea, se angustian y sufren estrés cada vez que se les presenta esta situación. La percepción negativa que el gato tiene sobre el transportín suele estar asociada a una mala o inexistente “socialización” con el mismo, desde las primeras etapas de su vida.

¿Cómo puedes ayudar a tu gato a reducir su nivel de estrés, a la par que se muestre más colaborativo contigo? Tips sobre cómo llevar al gato al veterinario sin estres.


– Deja el transportín al alcance del gato.

Utiliza siempre un transportín rígido y desmontable, de forma que puedas acostumbrar a tu gato a su presencia progresivamente y por piezas. Además, este tipo de transportines permiten que en las visitas al veterinario el profesional lo pueda manipular en la parte de abajo del mismo, ayudando a que se sientan más cómodos y seguros.

Si el transportín está siempre disponible para que tu gato lo utilice a modo de escondite o lugar de descanso, se familiarizará con él y lo percibirá como parte de su entorno.

Puedes premiar a tu gato, cada vez que le veas usando su transportín por voluntad propia, de forma que se genere una asociación positiva “transportín-recompensa”; esto fomentará que lo perciba como una experiencia inocua y positiva.

– Puedes utilizar Feliway Optimum, o Remedy Rescue de Flores de Bach.

La feromona facial felina sintética F3 de Feliway imita a la feromona facial F3, sustancia química que de forma natural el gato segrega mediante el frotamiento de su cara contra superficies, objetos, e incluso contra nosotros mismos. Deja de esta manera su olor impregnado el entorno, lo que favorece que se sienta seguro y relajado. El difusor que libera de forma constante esta feromona puede contribuir a reducir el nivel del estrés del gato, por ejemplo ante un cambio o una situación atípica o nueva para él. Para desplazamientos al veterinario u otros viajes se recomienda rociar el transportin con Feliway en spray por dentro y por fuera unos 20 minutos antes de hacerle entrar en él. Así conseguimos potenciar el olor familiar y mitiga la sensación de angustia.

También puedes utilizar Remedy Rescue de Las Flores de Bach, para mitigar estas situaciones de ansiedad, miedo y estrés.

– Acompaña a tu gato dentro del transportín con una manta o cojín cálida, mullida y suave que lleve su olor, así como algún objeto o juguete favorito también impregnado con su olor.

Otro de los puntos claves de cómo llevar al gato al veterinario es utilizar sus objetos “personales”, le generarán familiaridad y sensación de calma y control, haciendo que se sienta más tranquilo y seguro dentro de su transportín.

– Cubre el transportín durante todo el trayecto.

Para los gatos: “lo que no se ve, no existe”. Aislarles del entorno durante el trayecto cubriendo completamente el transportín con una manta (preferiblemente que también huela a él y rociada con Feliway) que les impida ver lo que les rodea en cada momento desde que salen de su hogar, hará que el gato mantenga la calma y se siga sintiendo seguro y en niveles bajos de estrés.


 

– Acostumbra progresivamente a tu gato a los viajes en coche.

Un viaje es una experiencia altamente estresante para los gatos, más aún cuando no han tenido la oportunidad de adaptarse paulatinamente a viajar desde edades tempranas. Empieza habituando a tu gato a ser introducido en el vehículo durante un corto período de tiempo. Posteriormente, haz esto mismo arrancando también el motor y, por último, empieza con trayectos cortos que vayan aumentando en duración progresivamente. Debes ubicar a tu gato en el suelo de la parte trasera del vehículo detrás del asiento del piloto o el copiloto.

Si acudes al centro caminando recuerda coger el transportín con las dos manos por la parte de abajo del mismo. No es aconsejable utilizar el asa ya que podría romperse con el peso o provocar la rotura de los cierres; por otro lado el vaivén le genera a tu gato sensación de inestabilidad.

 

– Ya en el centro, ubica a tu gato en un lugar elevado.

Este sería nuestro último tip sobre cómo llevar al gato al veterinario sin estrés. Los gatos son muy sensibles a ruidos y olores nuevos, y elevan su nivel de estrés. Cuando llegues al centro ve a la sala de espera exclusiva para gatos y deposita el transportín en una zona elevada, donde tu gato se sentirá más seguro. No descubras el transportín en ningún momento para evitar que se angustie al ver todo lo nuevo que le rodea. Una vez dentro de la consulta, no fuerces a tu gato a salir del transportín si no desea hacerlo por voluntad propia. Es crucial para reducir el nivel de estrés y ansiedad que seamos pacientes, y le demos tiempo y espacio para aclimatarse al entorno y tomar la iniciativa.


 

Texto : HOSPITAL VETERINARIO MENES SL

Cómo llevar al gato al veterinario sin estrés. Consejos (hvnachomenes.com)

Fotos: Animales acogidos de la Asociación Corazón Animal

Video de cómo hacer el atillo.